viernes, 17 de octubre de 2014

De los errores se aprende






Muchas veces me paso de lista. O de tonta, depende de cómo se mire… El caso es que en este aprendizaje continuo en el mundo de la costura y del punto a veces las cosas más simples tienen mucha importancia.


Hace varios meses empecé una colcha para el futuro bebé de una amiga embarazada. La colcha se basaba en la unión de muchas tiras de colores de distinto tamaño que luego se iban cortando y cosiendo para hacer una composición como en gajos… Algo parecido a esto pero mucho más grande:

Fuente: pinterest


Me pareció una idea original y una oportunidad de ir usando los retales de telas que inundan mi armario. Así que me lancé a ello. 


Corté una gran cantidad de tiras y empecé a coserlas. Fue en este último paso donde no tuve la precaución de ir sujetando con alfileres todo el bode de las tiras a la hora de pasarlas por la máquina. Como además cada una era de un largo distinto no me preocupó que no coincidieran en el final, total luego ajustaría las medidas finales al ir recortando las piezas…


El resultado fue que una vez cosidas todas las piezas eso no había forma de cuadrarlo. Al no ir sujetando a lo largo las tiras al coser las holguras, elasticidades y direcciones de hilo había provocado que no fura un tejido homogéneo.


A lo largo de su confección había acabado bastante harta del proyecto. ¿No os pasa a veces? Lo que estás haciendo no cumple tus expectativas y vas cogiéndole manía. Así que decidí parar, “dejarlo descansar” y ¡a otra cosa mariposa!


Unos meses después me propuse darle una salida digna al trabajo realizado y opté por hacer una “minicolcha” doblando por la mitad lo que ya tenía hecho. La oportunidad que derivó de mi error inicial vino en el momento del acolchado ya que me lancé con el método de acolchado libre que nunca había probado.


Es una técnica en la que la tela está prácticamente libre y puedes moverla en cualquier dirección. Como los dientes de arrastre de la máquina se esconden, el largo de la puntada depende también del movimiento que se le vaya dando a la tela. Es un sistema que permite hacer cualquier dibujo sobre la tela pero es bastante complicada de dominar, incluso entre costureras expertas, y requiere de mucha práctica.


Así ha quedado mi colchita:




  


 



 






 En resumen, y dada mi inexperiencia en el acolchado libre, estoy bastante satisfecha. Hay mucho margen de mejora pero creo que he conseguido mi propósito y el resultado es algo bastante digno. Gracias a que el proyecto no me enloquecía me decidí a lanzarme con esta técnica que, resultados a parte, me ha parecido muy divertida así que en general estoy muy contenta.


Moraleja: de los errores se aprende y voy a empezar a cambiarlos por oportunidades.



 Fuente: pinterest




¡Buen finde!


María



https://feedburner.google.com/fb/a/mailverify?uri=blogspot/JqPGg&loc=es_ES

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por tu comentario! Me ayuda a hacer un blog más interesante y útil para todos.
Thank you for your comment! It helps me to improve the blog and make it more useful for all of us.