Cuando el packaging cuenta

El complemento perfecto para un trabajo en el que has puesto empeño, tiempo y pasión es un packaging cuidado.

Aunque me alucinan las maravillas que con poco se pueden conseguir al preparar un regalo, he de reconocer que demasiadas veces descuido este último paso.

Consciente de ello, me he comprometido conmigo misma a trabajar con más cuidado el empaquetado de mis creaciones, especialmente si son encargos de amigos y conocidos que confían en mí para elaborar un detalle para alguien especial para ellos; e intentar que sea lo más artesanal posible para reforzar la línea handmade del regalo.

Ya visteis la semana pasada como quedaron el bolso, el broche de mariquita y el jabón artesanal que preparé para el encargo de una compañera de trabajo (si os lo perdisteis podéis echarle un vistazo aquí). En este caso, para el bolso opté por comprar una bolsa de regalo en tienda ya que quería algo bastante resistente con consistencia, el resto es elaboración propia.

Esta semana os quiero enseñar cómo ha quedado el empaquetado de los collares de trapillo que hice para mi amiga Luisa. Utilizando un sobre de papelería blanco, etiquetas, unas pinzas de madera y un sello ha quedado un packaging que me parece divertido y diferente (o al menos eso he intentado).

 

 

¿Os gusta? ¿Os da alguna idea para vuestros regalos navideños? Espero que sí.

Si estáis buscando inspiración para estas navidades os recomiendo pasar por mis tableros de Pinterest “Packaging”, “Etiquetas” y "Sellos" con muchas ideas fáciles y material descargable para que vuestros regalos sean únicos y sorprendan desde el primer momento.

¡Feliz finde!

María